Rafaela Camacho: “Enfermería Clínica tiene una tasa de rechazo relativamente alta, entorno al 75 casi 80% en algunas tipologías de artículos”

Entrevista con la editora jefe de la revista Enfermería Clínica

RAFAELA CAMACHO es doctora en Enfermería por la Universidad de Huelva con Mención Internacional y editora jefe de la revista Enfermería Clínica.

Camacho terminó la diplomatura de Enfermería en 2002. Después se desplazó al Reino Unido con la intención de trabajar como enfermera asistencial durante un año. Al final se quedó seis años en una unidad de cuidados intensivos del Hospital James Cook de Middelsbrough, al Noreste de Inglaterra, donde profundizó en la investigación y tomó conciencia de cómo ésta debe ser aplicada a la práctica diaria. De esta manera comenzó su recorrido en el campo de la investigación con un máster en la universidad. Al volver a España, en 2008, cursó un máster oficial en la Universidad de Huelva, obtuvo una beca predoctoral y realizó la tesis doctoral, que finalizó en 2014. Su amplio currículo incluye nueve años de experiencia clínico-asistencial , más de diez en la docencia universitaria y en programas de formación, codirección de másters, dirección de tesis doctorales y participación en múltiples proyectos de investigación, entre otros. Es miembro del Instituto de Investigación en Cuidados de Salud (Investén-ISCIII) y actualmente es docente del Departamento de Enfermería de la Universidad de Huelva.

La Dra. Camacho participó en la sesión inaugural del Máster interuniversitario de Investigación en Salud por la Universidad de Lleida (UdL) y la Universidad de Vic (UVic-UCC) el pasado noviembre en la Facultad de Enfermería y Fisioterapia de la UdL.

Usted es editora jefe de la revista Enfermería Clínica. ¿Desde cuándo? Hace tres años que soy editora jefe y llevo seis en el comité editorial.

¿La publicación se dirige sólo a enfermeras? La orientación de Enfermería Clínica es bastante abierta. Si bien es cierto que nuestros lectores y autores principales son enfermeros y enfermeras, no somos restrictivos. Realmente publicamos en todas las disciplinas de ciencias de la salud y todo aquello que tenga que ver con el cuidado y la salud de la población. Tenemos un ámbito bastante amplio. Incluimos publicaciones de docencia, gestión y ámbito clínico.

¿Qué tipo de investigaciones publican? La revista tiene distintas secciones. Una parte se dedica a la investigación primaria, la sección de artículos originales y originales breves, tenemos una sección de artículos de cuidados orientada al desarrollo de protocolos, evaluación inicial, pilotaje… También tenemos una sección de artículos especiales, que son más artículos de revisión, y después artículos de enfermería basada en la evidencia que, fundamentalmente, son síntesis de evidencia o artículos comentados que ya han sido publicados en otras revistas con anterioridad.

La revista publica investigación original, ¿qué significa? Es investigación primaria. Toda aquella que es resultado de una investigación que se lleva a cabo en el ámbito asistencial o en la gestión. La investigación secundaria es aquella que deriva de otras investigaciones. Sería el caso de una revisión sistemática, por ejemplo, porque es una síntesis de la evidencia que muestran otros artículos de investigación. Por eso la investigación primaria original es la que más se prima, ya que es el resultado directo de estudios de investigación.

¿Cuál es el objetivo de esta revista? Es el compromiso de la difusión y conocimiento de la disciplina enfermera. Esto conlleva publicar resultados de estudios de investigación, promover e incentivar la investigación en el colectivo y la disciplina enfermera y contribuir, de alguna forma, a la salud de la población y a una mayor difusión y visibilidad de los resultados.

“Habría que hacer un proceso de alfabetización digital de la población para poner a su disposición las revistas científicas para que éstas sean la fuente de consulta sobre sus dudas”

Enfermería Clínica está al alcance de una audiencia general. Puede estarlo. Cada número comenzamos con un artículo editorial que es una cabecera que pretende ser un punto de reflexión de análisis crítico sobre un tema concreto que está realizado por un autor invitado. Realmente, en este sentido, esto es cultura general y una profundización del campo sanitario que podría ser de interés incluso a personas que fueran lejanas al ámbito sanitario. Es cierto que hay partes en las que, para interpretar el resultado de las investigaciones, se requiere un cierto conocimiento básico y de tecnicismos. Sin embargo, es una revista que intenta ser asequible para ser leída por la población en general.

Como editora jefe, usted tiene la última palabra antes de publicar un manuscrito. ¿Cómo se validan los trabajos? Las revistas científicas tenemos un riguroso proceso editorial. Es cierto que, el comité editorial y la editora jefe tienen un gran peso en la decisión de publicar un trabajo, pero realmente existen unos mecanismos que garantizan la objetividad e imparcialidad dentro del proceso editorial. En nuestro caso, nosotros pertenecemos a la editorial Elsevier y disponemos de una plataforma de gestión de artículos que facilita mucho esa labor. Cuando un artículo llega a la revista a través de esa plataforma, la editora responsable asigna a los editores que se van a encargar de ese artículo y es este editor el que se encargará de seleccionar a los revisores que van a evaluar el artículo. Tenemos un pull, una base de datos muy amplia de revisores expertos en distintas áreas clínicas, de investigación, metodología, etc. Intentamos buscar un perfil de revisor que se adecue a la temática del artículo. Una vez que recibimos el feedback de los revisores, es una revisión por pares, a ciegas, con lo cual los revisores no saben la autoría de la persona que envía el artículo. Los revisores envían su informe y somos los editores los que contrastamos ambos informes y tomamos una decisión que puede ser: modificaciones (sugerencias de mejora a los autores para que continúen el proceso), aceptación directa del artículo o rechazo.

¿Se rechazan muchos trabajos? Debo reconocer que tenemos una tasa de rechazo relativamente alta, entorno al 75 casi 80% en algunas tipologías de artículos. Realmente, la tasa de rechazo viene dada por la calidad de los trabajos y artículos que recibimos. Nosotros tenemos claro el estándar de calidad que hay que exigir y siempre intentamos dar un feedback de manera constructiva. Los trabajos que no cumplen unos mínimos, se tienen que rechazar necesariamente.

“La diferencia entre Reino Unido y España está en las ratios de pacientes, que son mejores allí y eso provoca una disminución la carga asistencial y, por tanto, la enfermera tiene tiempo para investigar”

¿Qué formatos tiene la revista? Tenemos dos modalidades. Está la revista en papel que también es importante, aunque la sostenibilidad y el mayor número de suscripciones es online a través de bibliotecas, instituciones sanitarias y otras instituciones de investigación, a nivel nacional e internacional seguimos manteniendo el formato papel que es el que llega al suscriptor individual que le gusta tener la revista para leerla. Como novedad, en el último año hemos hecho una apuesta por la internacionalización y hemos incluido, de todos los artículos, su traducción íntegra en inglés sin coste para los autores. Por todo ello, la revista se está leyendo más en el extranjero y recibimos más autores interesados en publicar.

Hoy en día se publica mucho a través de plataformas digitales. ¿Cómo ha afectado eso a la manera de publicar y a lo que se publica? Ha afectado sobretodo a la visibilidad. Gracias a este tipo de plataformas en las que se comparten la bases de datos, se publican e indexan las revistas, el conocimiento y la información llega de manera inmediata a cualquier rincón del mundo. Se gana en visibilidad y disponibilidad de los resultados de la investigación. La necesidad de publicación y de hacer carrera investigadora y docente, conlleva que haya una mayor conciencia en la necesidad de publicar y, a veces, los trabajos no siempre reúnen los requisitos mínimos. Nos encontramos con artículos de una calidad variable, unos muy buenos y otros que quedan por el camino porque no llegan a los estándares mínimos. A veces se comenten errores importantes, desde el punto de vista de la ética de la investigación. En alguna ocasión, de manera excepcional, hemos tenido un mismo autor que intenta publicar en varias revista en paralelo. También nos encontramos con investigaciones que no han pasado los filtros de los comités de ética correspondientes o no cumplen con aquellas medidas exigibles, como por ejemplo la firma del consentimiento informado de los participantes del estudio que garantice la confidencialidad y anonimato de los datos. En ese sentido somos muy estrictos. No publicamos nada que no tenga unas garantías determinadas desde el punto de vista de la ética de la investigación y, al mismo tiempo, tenemos sistemas que nos permiten identificar incluso delitos de plagio. En este ámbito somos muy estrictos, en otros podemos ser más flexibles e intentamos dar un punto constructivo a los autores para que no cesen en su intento de publicar, pero hay determinadas líneas rojas que no se pueden traspasar en la publicación científica.

¿Cómo ha cambiado en los últimos años el mundo de la edición? Ha ido cambiando necesariamente. Ahora estamos en un momento de transición y de debate generalizado en el mundo editorial sobre revistas de acceso abierto o no, suscripciones institucionales… aquí hay mucho que analizar. Hay ventajas e inconvenientes. En Enfermería Clínica no queremos renunciar a la versión impresa de la revista, aún apostando por la mayor visibilidad que dan las plataformas online, ya que suponen una facilidad en el acceso a la información por parte de autores y lectores. Se está transformando también el usuario-lector de revista científica. Ahora, gracias al acceso generalizado a internet, le da al ciudadano normal una potencialidad de obtener información de muchas fuentes. El problema es que no todo lo que está en la red es fiable. Creo que habría que hacer un proceso de alfabetización digital de la población para poner a su disposición las revistas científicas para que éstas sean la fuente de consulta sobre sus dudas.

Cómo editora, ¿qué es lo que valora o qué le influye a la hora de decidir qué publicar? Asegurar la calidad y la rigurosidad metodológica. También tenemos otras variables en cuenta, como por ejemplo, líneas prioritarias de investigación, compensar que haya una variedad suficiente de metodologías. La investigación en enfermería se tiende mucho a la utilización de metodologías mixtas, tanto cualitativa como cuantitativa. No tenemos una predilección por una u otra, sino que intentamos potenciar la investigación de calidad. Mientras mayor proyección tenga una investigación, más posibilidades tiene de ser publicada. Si son investigaciones de carácter multicéntrico, con poblaciones amplias, con datos significativos y que puedan ser, sobre todo, aplicables a la práctica asistencial. La investigación debe servir para mejorar la salud de la población, la atención a los usuarios y las intervenciones de los profesionales. Si además influye en la toma de decisiones en política sanitaria, creo que es la herramienta indispensable que puede hacerlo posible.

Hay temas que suscitan más interés que otros. ¿Tienen prioridad? Somos una revista generalista y no estamos orientados a un ámbito concreto. Por ello, siempre publicamos una miscelánea de temas de diverso índole para dar respuesta al posible interés de nuestros lectores. En los últimos años están cobrando mucha importancia el diseño y la validación de instrumentos, los ensayos clínicos y las revisiones sistemáticas. Por todo ello, hemos apostado por hacer un número monográfico una vez al año centrado en un tema que identificamos como relevante en el mundo de la enfermería. Comenzamos con la atención al paciente crónico, uno de calidad asistencial y seguridad y, para este 2019 preparamos uno centrado en el desarrollo de nuevos roles en enfermería, fundamentalmente la de práctica avanzada y las especialidades.

¿Qué es lo más difícil a la hora de validar un trabajo? Todas las partes del proceso editorial son importantes. La asignación de un editor responsable que haga el seguimiento del artículo, asignar a los mejores revisores del tema (bien por el conocimiento del tema o por el dominio la metodología empleada). Intentamos garantizar que todo eso se hace de manera sistemática para evitar las fisuras. A veces hay que hacer muchas comprobaciones -que no haya ningún problema de plagio, que las citas y las referencias bibliográficas estén perfectamente incluidas en el documento, que sea bibliografía actual y que la metodología utilizada y los resultados que se muestran, tienen garantías de ser fiables. Es cierto que, en los últimos años, estamos extremando la minuciosidad con la que valoramos esos aspectos. Trabajamos para que lo que publicamos sea relevante, veraz y de utilidad profesional.


¿Cuánto tiempo pasa desde que se recibe un artículo hasta que se publica? Los tiempos editoriales también son unos de los indicadores de calidad como revista científica. Estamos trabajando para acortar esos tiempos. Debo decir que los artículos de baja calidad se rechazan pronto, intentamos que sea las primeras 6-8 semanas. Si tarda más tiempo es que cumple el requisito para ser derivado a revisor, con lo que se inicia el proceso editorial propiamente dicho. Primero se hace un filtro, si se supera pasa a revisores y sino, se rechaza. A partir de ese momento el tiempo que pase dependerá de la agilidad de los revisores, de la agilidad editorial y del tiempo que tarden los autores en incluir las modificaciones. Nosotros nos marcamos unos objetivos en tiempo. Lo ideal sería que un artículo no tardara más de seis meses en ser publicado. La realidad es que, a veces, se demora ligeramente por todas las vicisitudes que se dan.

Respecto a la investigación en enfermería. ¿Ha aumentado? Ha aumentado muchísimo de forma exponencial. Puede ser producto de muchas variables. El hecho que se considere la investigación currícularmente para poder promocionar en la carrera profesional está siendo un incentivo. Pero también es cierto que hay una mayor concienciación y una mayor apuesta formativa en la investigación ya desde el Grado. Eso, más los añadidos de formación a nivel de master y doctorado, está haciendo que haya un hervidero de investigación enfermera y de publicaciones científicas, no sólo a nivel nacional sino también internacional.

Después de estar seis años en Reino Unido, ¿qué cree usted que necesitan las enfermeras españolas para poder investigar? La enfermería española tiene un gran potencial pero faltan recursos a nivel asistencial. Hace falta una apuesta institucional para la investigación, la profesionalización de la gestión y el desarrollo de roles avanzados. En España necesitamos figuras como la Nurse Practitioner o Nurse Consultant que son roles muy interesantes que integran la investigación como uno de los pilares básicos, no sólo como asumir más competencias en cuanto a la gestión de pacientes, tener una cartera propia de servicios sino también, poder evaluar resultados y permitir que esos resultados sirvan para guiar la práctica clínica. La diferencia entre Reino Unido y España está en las ratios de pacientes, que son mejores allí y eso provoca una disminución la carga asistencial y, por tanto, la enfermera tiene tiempo para investigar. En España la investigación es el resultado de una inquietud personal, ya que las enfermeras sacan tiempo de fuera del horario laboral. Creo que en nuestro país hay que mejorar la ratios a nivel asistencial, mejorar la inversión en investigación en cuidados y desarrollar los perfiles de enfermería de práctica avanzada que llevan implícito ese mayor peso de investigación.

¿Cómo motivarías a las enfermeras españolas para que investigaran? El impacto de la investigación debe ir más allá del impacto de la publicación en una revista. Debe tener un impacto social, es decir, que haya realmente una repercusión y que los resultados de las investigaciones sirvan para mejorar la política sanitaria, la calidad de vida de las personas y para construir un sistema sanitario mas eficiente, más ágil y más polivalente. Ese debe ser nuestro elemento motivador. Además, a mayor formación, mayor aplicabilidad de la investigación. Muchos profesionales huyen de la investigación por desconocimiento. Una vez que te adentras en la investigación y le ves la utilidad, te acaba enganchando y acaba conviertiéndose en una herramienta indispensable.

abril

29abr.(abr. 29)09:0019juny(juny 19)14:00CURS COILL: SUPORT VITAL AVANÇAT (SVA)

maig

29abr.(abr. 29)09:0019juny(juny 19)14:00CURS COILL: SUPORT VITAL AVANÇAT (SVA)

03maig09:0013:30CURS COILL: ASPECTES SOCIALS, CULTURALS, ANTROPOLÒGICS I ÈTICS EN EL NAIXEMENT (DIADA LLEVADORES COILL)

03maig09:0017:00DIADA DE LES LLEVADORES I RESIDENTS (LLIR) DE LLEIDA

14maig(maig 14)09:0021(maig 21)20:00CURS COILL: INTRODUCCIÓ A LA GESTIÓ INFERMERA DE LA DEMANDA AGUDA (GID)

juny

29abr.(abr. 29)09:0019juny(juny 19)14:00CURS COILL: SUPORT VITAL AVANÇAT (SVA)

X